La Salvación del alma es lo más grande que pueda alcanzar un ser humano. En el alma se centran todas las emociones, de ella salen las decisiones para hacer lo bueno

o lo malo. por eso la Biblia dice: el alma que pecare, esa morirá. Pero Dios nos ofrece vida en abundancia: Salvación y Vida eterna, en felicidad. Él nos selló, nos separó para Él; para que el diablo no pueda tocarnos.