los dones del Espíritu Santo se conceden a los que viven en Santidad. Hay que estar libre de concupiscencias, embriagueces, orgías, hechicerías, disipación: situaciones que no permanecen ni traen buenos

resultados, pecados graves o abominables; como la idolatría. La idolatría es honrar, adorar, poner flores, encender velas, hacerle pedidos, ponerle comida, rezarle: a las imágenes.