Hay un regalo tremendo, para los que creen en Dios y guardan su Palabra; que es beneficiosa para el hombre, la mujer, la familia, la sociedad y los gobiernos del

mundo. Dios nos llevará a una morada especial, cuando Jesucristo fuere manifestado. Pero hay que esperar este momento como hijos obedientes a sus mandamientos; no como antes, que éramos ignorantes guiados por la religión.