La Leyes de Dios fueron escritas como manuscritos en tablas de piedra, marfil, madera, pergamino, pieles de animales, papiro, tablillas de madera o de un arbusto; a su orden. Luego apareció

la imprenta y se imprimió la Biblia, en papel. El Señor sabía que la humanidad era cambiante, y que vendrían lobos rapaces tratando de enseñar cosas diferentes; para trastornar la fe de muchos.