Jesucristo y el padre son el dios de toda consolación. dios es el padre y Jesucristo el Hijo: están sentados en su trono, en el Cielo. Pero el Espíritu Santo siempre

se mueve sobre la tierra, protegiendo a la humanidad; para que no haga lo malo. Cristo envió a ese consolador, que está dentro de nosotros, y con nosotros. Ninguna blasfemia contra el Espíritu Santo, será perdonada.