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Noticias Cristianas
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El Dr. Lawrence Mayer, médico psiquiatra, epidemiólogo y matemático, Profesor en la Universidad Johns Hopkins y en la Universidad de Arizona; y el Dr. Paul McHugh, el más importante psiquiatra norteamericano

en la actualidad: han publicado una revisión de 500 estudios científicos, acerca de orientación sexual e identidad  de género. Sumario.- Orientación sexual: La orientación sexual es una propiedad innata y biológicamente inalterable de los seres humanos. Existen factores condicionantes: genes y hormonas asociados con el comportamiento y la atracción sexual; el 80 % de adolescentes varones que sienten atracción por el mismo sexo, dejan de sentirlo como adultos; abuso sexual infantil. Sexualidad: Los miembros de la población no-heterosexual tienen mayor riesgo de trastornos de ansiedad, depresión, abuso de sustancias, riesgo de suicidio y problemas de salud mental. Identidad de género: No tiene base neurobiológica; sólo una minoría de niños que experimentan identificación con el género contrario, seguirán haciéndolo en la adolescencia o adultez.

Se resume: Los individuos no-heterosexuales y transgénero son con frecuencia objeto de tensión social y discriminación; pero la ciencia no muestra que esos factores en su mayoría, explican las disparidades de salud entre ellos y la población general. La literatura científica no muestra con claridad explicaciones biológicas, de las causas por las que algunos individuos afirman, que su género no corresponde a su sexo biológico. Es alarmante verificar terapias, tratamientos e intervenciones quirúrgicas prematuras: la mayor parte de niños y adolescentes que se identifican con el género opuesto a su sexo biológico, dejarán de hacerlo cuando sean adultos.

Respecto a la comunidad LGBT: “que padece una tasa desproporcionada de problemas de salud mental en comparación con la población global”… “debemos encontrar formas de aliviar su sufrimiento”…”la idea de que un niño de dos años que haya expresado pensamientos o comportamientos identificados con el sexo opuesto, puede ser etiquetado de por vida como transgénero no tiene absolutamente ningún apoyo científico. De hecho, es una iniquidad creer que todos los niños que tienen en algún momento de su desarrollo pensamientos o comportamientos atípicos sobre el género, particularmente antes de la pubertad; deben ser animados a ser transgénero”.

Fuente: protestante digital.com

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